Juan Pablo López fue de menos a más en Viña 2025 y terminó sacando risas con chistes de los malls chinos y de Gabriel Boric  

La salida de un humorista al escenario de la Quinta Vergara después de la presentación de un artista anglo suele ser compleja. Tal vez por lo mismo Juan Pablo López, encargado de la comedia el jueves 27 de febrero en Viña 2025, quiso enganchar el show de Incubus con el arranque de su rutina.

“Estuve escuchando Incubus y estoy impresionado con el nivel de inglés de este público”, tiró de entrada el comediante que se presentaba por segunda vez en el Festival de Viña del Mar. Su primera vez en la Quinta Vergara fue en 2017, cuando se ganó gaviotas de plata y oro.

Tras ello contó: “Cuando supe que me tocaba esta noche hice una hueá muy ridícula: tomé un curso de inglés. “¿Han escuchado esa frase ‘nunca es tarde para aprender’. Bueno, sí es tarde para aprender. No aprendí ni una hueá. Nada, nada”.

Aquel relato provocó las primeras risas del público, sin embargo en medio de eso se provocaría un momento incómodo: un ruidoso abucheo desde la galería, pero que no tenía nada que ver con la rutina de Juan Pablo López.

Como ha ocurrido en otras ocasiones, el público de la galería reclamaba por las luces encendidas apuntando hacia su sector. López se vio obligado a interrumpir su rutina, pero hizo gala de su buena capacidad de improvisación, esa misma que recurrentemente utiliza en sus shows y de la que da cuenta a través de redes sociales.

“Gracias al iluminador por cagarme el chiste. Despedido por hueón”, expresó, provocando risas y aplausos del público. “¿Falta allá o estamos bien? No, no estamos bien. Arriba en la galería no están bien”, manifestó, mientras las pifias no cesaban.

Momento incómodo que produjo algo de inseguridad, sin embargo López supo rápidamente retomar su rutina con el tema del inglés, pasando a la relación de los chilenos con los turistas “gringos” y algunas experiencias de sus viajes.

Luego dio paso a chistes sobre su natal y “feíto” San Antonio, profundizando en diversas experiencias precarias como estudiante. Eso mismo le permitió pasar a un bloque de chistes con su hijo como protagonista.

Las sucesivas comparativas entre sus preacariedades de infancia y las comodidades que ha gozado su hijo le permitieron afianzarse y dejar atrás el incómodo incicio. Prueba de ello es que el público no sólo respondió con risas y aplausos, también siguió sus consultas.

“A mí me sacaban los piojos con parafina, ¿somos todos de parafina acá?”, dijo y el público respondió con un categórico “sí”.

De los chinos al Presidente Boric

A lo largo de su carrera en la comedia, Juan Pablo López ha sabido manejarse con diversos temas de actualidad nacional. Y en esta ocasión no fue la excepción. Hubo chistes sobre migración, delincuencia y hasta del Presidente Gabriel Boric.

La migración china la abordó con chistes sobre los denominados “malls chinos” y sus dueños. “Se hacen que no hablan español”, reclamó y provocó risas al hablar de los productos “chin boleta, chin galantía”.

También habló del éxito de empresarios chinos en nuestro país: “Todos los chinos que vienen a Chile son exitosos. ¿Han visto un chino mendigo? ¿Han visto un chino fracasando? Son tan exitosos los chinos, que yo nunca he visto un chino manejando un auto chino, nunca he visto un chino con un Changan”. 

La delincuencia no podía quedar fuera de esta rutina. Ahí habló de Carabineros, causando incluso la risa de algunos efectivos policiales presentes en la Quinta Vergara cumpliendo servicio: “Se robaron una patrulla, ¿cómo lo hicieron? se bajaron a fiscalizar, pasó un hueón y se robaron la patrulla. Me imagino a un paco llamando al 133″, contó y luego se lanzó con un chiste sobre carabineros dados de baja por consumo de droga: “Te creo los del Orfeón, ¡son músicos!, ¡se justifica!”

Siempre en el tema delincuencia, López la sacó a colación citando al Presidente Gabriel Boric. “Un día va a salir Boric en la puerta a decir ‘estamos aburridos de la delincuencia, que alguien haga algo’”, tiró provocando carcajadas del público.

El nombre de Boric, que provocó algunos aplausos y algunas pifias, volvió a ser citado por López. El humorista bromeó con la figura del Presidente así: “Todos los gobiernos lo hacen mal. Son muy pelotudos. Pero que le vaya mal a Boric es nuestra culpa. Boric no tenía idea que iba a salir presidente, no tenía ni terno. Salió presidente y fue a Johnson a comprarse un terno. Le dijeron, ‘mira tenemos este, pero tiene malo el cierre’. ‘Ya démelo no más’”.

Sus chistes sobre el Jefe de Estado fueron el remate de su primer bloque y tras ello recibió las gaviotas de plata y oro, coronando así otra noche exitosa en Viña del Mar, tal como lo vivió en 2017. Esta vez fue de menos a más, pero logró superar sus nervios del comienzo en base a su vasta experiencia sobre los escenarios.

Ya mucho más suelto en el bis, Juan Pablo López hizo reír con chistes sobre el programa “Alerta Aeropuerto” o los fanáticos del running. Pero sobresalió una pesada broma sobre la participación de Paola Volpato como coanimadora en una de las jornadas de la presente edición del Festival.

“Yo no fumo marihuana, me hace mal la marihuana… Un día mis amigos me insistieron, me dijeron ‘fuma’, me pegué unas quemadas y ahí quedé, con demencia senil, en pleno carrete sentado en una silla, con un trozo de torta y un té. Una vez me dieron unas quemadas y ahí quedé inmóvil, me parecía a la Volpato presentando”, lanzó.